Por Carina López y Pool Contreras
MÉXICO/Xinhua
El interés de los jóvenes médicos mexicanos por practicar la acupuntura china ha crecido en los últimos años. Y esta técnica milenaria se ha convertido en una herramienta eficaz para tratar a las personas con enfermedades crónico-degenerativas en México.
Así lo consideró Julio César Almanza, coordinador de la especialización en Acupuntura y Fitoterapia, que imparte clase en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), la tercera institución educativa más importante de México.
«Hemos visto que los médicos recién egresados son quienes buscan esta especialidad como un área de oportunidad y eso refleja que la misión de la medicina, de la terapéutica, va evolucionando con el paso del tiempo», comentó el galeno a Xinhua.
En las últimas generaciones de la especialización, apuntó, se ha registrado un incremento de jóvenes médicos que consideran la acupuntura como una alternativa terapéutica de primer nivel. «Nuestra intención es que, a partir del conocimiento que ellos tienen de la medicina y de la terapéutica convencional con fármacos, puedan combinarla con la acupuntura o con la fitoterapia», dijo el coordinador.
La acupuntura, un componente fundamental en la medicina china, se basa en tratar dolencias mediante la introducción de agujas metálicas en ciertos puntos del cuerpo humano. Esta terapéutica tiene propiedades analgésicas, antiinflamatorias, vasculares, miorrelajantes y moduladoras que pueden inducir cambios fisiológicos en la respuesta del organismo.
Por ello, son cada vez más los mexicanos que confían en este tratamiento integral de afecciones crónicas como hipertensión, diabetes, obesidad o tabaquismo, así como dolores crónicos en distintas partes del cuerpo. En las últimas décadas, las enfermedades crónico-degenerativas han sido la principal causa de muerte en México.
La acupuntura, según el experto de la UAM, no reemplazará a la medicina convencional. Pero sí resulta ser un complemento eficiente para muchas enfermedades que padece la población a nivel nacional.
La técnica china es la base de estudio de la especialización, que dura dos años, donde también se fomenta el uso de puntos acupunturales que cuentan con evidencia científica.
«De tal manera que el médico sabrá, perfectamente, si el cuadro clínico amerita tratamiento combinado.
Es decir, fármacos y acupuntura o fitoterapia, o si solo necesita un tratamiento especializado con fármacos, o si puede sustituir los fármacos con la acupuntura», explicó Almanza.
En la actualidad, México ha experimentado una gran apertura hacia otras terapéuticas beneficiosas para el ser humano porque, antes, se pensaba que solo la medicina convencional tendría un buen resultado en los pacientes.
«Hoy en día, se sabe que cada una de estas alternativas terapéuticas tienen una razón de ser, tienen limitantes y tienen alcances que pueden aprovechar los médicos para cuidar a los pacientes», recalcó el también doctor en Biología Experimental.
Una vez que los alumnos concluyen el posgrado, su perspectiva sobre la medicina alternativa es más amplia debido a que conocen todos sus beneficios y ponen en práctica lo aprendido para favorecer a más personas.
«Lo que ellos (los egresados) buscan es aplicar la terapéutica en su consultorio privado o público, dependiendo de su área de labor», afirmó Almanza.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen pruebas empíricas y científicas que avalan los beneficios de la acupuntura, así como las terapias manuales y diversas plantas medicinales, en enfermedades crónicas o leves.
