En la última jornada del Congreso Internacional de la SSPMQ, el Dr. Franz Vanderschueren, director del Centro de Seguridad Urbana y del Magister en “prevención, seguridad urbana y policía criminal” (Bélgica) y el Mtro. Martín Appiolaza, director de relaciones institucionales de la municipalidad de Godoy Cruz (Argentina), se enlazaron vía videoconferencia para participar en una mesa de diálogo titulada ‘Prevención social integral de la violencia y el delito desde los gobiernos locales’.
Esta mesa se dividió en cinco temas principales, en los que ambos compartieron sus opiniones y sus experiencias en temas de prevención social, desde los actores principales, la importancia de los gobiernos locales y de la participación de la ciudadanía.
Importancia del gobierno local en materia de seguridad
Tanto el Dr. Franz como el Mtro. Martín expusieron que los gobiernos municipales son imprescindibles en temas de prevención, porque son la entidad que tienen el poder de intervenir directamente en la ciudad, tienen la capacidad de articular políticas que asistan a las necesidades locales y, lo más fundamental de todo, son el organismo más cercano a los actores locales.
Además de los tres elementos anteriores, el gobierno local (llámese condado, municipio, ciudad) es el que recibe directamente las demandas ciudadanas y cuenta con la suma de actores institucionales que impulsan desde diferentes campos (de salud, educación, inclusión, urbanismo, etc) una comunidad de armonía. Sin embargo, también es necesario, explicó el Mtro. Martín, que el municipio cuente tanto con proximidad como con legitimidad y liderazgo para ser un impulsor importante en la prevención social.
Actores locales a considerar
Para ambos expertos hay tres grandes actores que se deben tomar en cuenta en cuenta en temas de previsión social. El primero es el municipio, específicamente, la figura de los gobernantes, quienes pueden ser los facilitadores o los obstaculizadores para la seguridad ciudadana, cuyo mayor desafío es el de lograr visibilizar cómo las acciones cotidianas de sus gobiernos tienen efecto en la población, y saber si su rumbo es el correcto.
El segundo gran actor es, por supuesto, el policía, un agente al que se le debe de dar voz para que pueda expresar sus necesidades y las de las comunidades a las que protege, y es tarea del gobierno tenerlo y mantenerlo como un aliado.
Y el tercer gran actor son los jóvenes, cuya participación se hace necesaria para comprender de manera íntegra y completa tanto los cambios culturales y sociales por los que atraviesa el municipio como para generar soluciones y evitar la fragmentación de políticas públicas.
Garantizar la continuidad de la política de prevención
Uno de los retos más importantes en materia de políticas de prevención es lograr que no sufran modificaciones indiscriminadas con cada gobierno local entrante, por lo que mantener una continuidad, aunque difícil en la práctica, es lo más ideal. Para ello es primordial socializar al gobierno con sus propias normas, tener instrumentos de mapeado de intervención legal que eviten la improvisación y contar con la participación de la población que sea la que dé los consensos sobre la actuación y aplicación de proyectos.
Trabajar con base en evidencias científicas y con voluntad política son las claves para no reiniciar todos los esfuerzos que se hagan en materia de seguridad pública.
La importancia de involucrar a la sociedad
Como se ha dejado ver tanto en esta mesa de diálogo como en varias conferencias, involucrar a los ciudadanos es esencial para tener un marco completo de la criminalidad y de las necesidades de la población. Y conocer los espacios en que confluyen las opiniones, en donde surge diálogo y se crean consensos, permitirá tanto entender los problemas y preocupaciones que afectan a la comunidad, como crear estrategias de solidaridad.
Pero aquí el mayor reto es contar con ciudadanos que quieran participar, que actúen con entusiasmo y objetividad, sin olvidar que también se deben incluir a las poblaciones que históricamente han sido excluidas. Sin embargo, esto también exige que el gobierno no infantilice a la población, sus preocupaciones y opiniones.
¿Cómo integrar a los jóvenes?
El último punto de discusión fue el de cómo lograr involucrar a los jóvenes en estos procesos de participación, algo que es especialmente complicado porque ese periodo en el uno es adolescente o joven es relativamente corto y en el que se dan constantes transiciones en la sociedad. Sin embargo es de gran importancia entender que: se les debe escuchar verdaderamente, que ahora tienen un papel de maestros (especialmente cuando se trata de nuevas tecnologías y los cambios sociales que los afectan) y no tratar de entenderlos desde una perspectiva de ‘las viejas generaciones’, después de todo, el mundo pronto le pertenecerá a ellos.
El Dr. Franz finalizó su participación reiterando que es importante comprender sus demanda de progresión y equidad, que es vital facilitar la relación entre policía y juventud, y que se deben encontrar buscar espacios para escuchar e integrar sus demandas en lugar de forzarlas sobre ellos.
Y el Mtro. Martín concluyó con que es necesario generar mecanismos para que las juventudes sean efectivamente escuchadas desde sus necesidades y no desde lo que el gobierno o la autoridad cree que necesitan. Lo importante es escuchar de manera efectiva.
