BUENOS AIRES/Xinhua
Sindicatos y organizaciones sociales marcharon por las calles de Buenos Aires, capital de Argentina, para expresar su rechazo a las reformas económicas anunciadas recientemente por el presidente del país, Javier Milei.
Los manifestantes se concentraron en la plaza frente al Palacio de Justicia, en el centro capitalino, y la protesta concluyó con al menos seis personas detenidas y un policía herido tras ser atropellado por un autobús durante la desconcentración de los participantes.
La manifestación fue convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT), sindicatos y organizaciones sociales en rechazo al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) firmado la semana pasada por Milei para «desregular» la economía del país sudamericano.
En declaraciones a la prensa local, uno de los cotitulares de la CGT, Héctor Daer, del gremio de los trabajadores de la Sanidad, dijo que «lo que hay que hacer es voltear» el DNU mediante acciones «en la política, en la justicia y en las calles». «Hay que ser inteligentes y tener la mejor estrategia», planteó el dirigente, mientras que su par en la conducción de la CGT, Pablo Moyano, del gremio de camioneros, sostuvo que «el DNU va en contra de los trabajadores y del país».
Durante el acto fue leído un documento que advirtió sobre la «feroz reforma laboral regresiva» prevista en el DNU, con medidas «arbitrarias, anticonstitucionales y lesivas de un vasto número de derechos civiles, comerciales y sociales». «Ser legal es respetar la Constitución. Ser legítimo es convencer a las mayorías.
Si no se respeta ese esquema, se corre el riesgo de no ser respetado y de no ser república. No se confunda, señor presidente, no somos la casta. Somos los trabajadores», indicó el documento. De la manifestación participaron obreros de la construcción y de la metalurgia, además de trabajadores camioneros, bancarios, de la sanidad y estatales.
También tomaron parte integrantes de movimientos sociales, como Unidad Piquetera, Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Movimiento Evita y Libres del Sur, además de espacios partidarios, como el Polo Obrero. Milei afirmó el martes que «los argentinos de bien» están dispuestos a afrontar el ajuste económico programado por su administración.
En una entrevista con el canal de televisión La Nación Más, subrayó que la situación económica que heredó al asumir la Presidencia el 10 de diciembre «requiere de medidas que a la vista de un observador convencional parecen audaces, pero el riesgo de no tomar el toro por las astas rápidamente, sería tremendo».
Horas después de asumir el cargo, el mandatario liberal dispuso una reducción en el número de ministerios nacionales, que pasaron de 18 a 9, junto a la devaluación de la moneda nacional, el congelamiento de las vacantes del empleo público y la eliminación de los subsidios que reciben los residentes en las tarifas de transporte público y energía.
Además, el 20 de diciembre firmó el DNU para desregular la economía nacional mediante reformas que buscan «destrabar un andamiaje jurídico e institucional opresor» que permita iniciar el «camino de la reconstrucción» nacional.
Horas después de asumir el cargo, el mandatario liberal dispuso una reducción en el número de ministerios nacionales, que pasaron de 18 a 9, junto a la devaluación de la moneda nacional, el congelamiento de las vacantes del empleo público y la eliminación de los subsidios que reciben los residentes en las tarifas de transporte público y energía.
La tercera economía de América Latina acumuló en los primeros 11 meses del año una inflación de un 148,2 por ciento, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, con la amenaza de una hiperinflación y el 40,1 por ciento de la población sumida en la pobreza.
El reciente decreto presidencial deroga la normativa que impide la privatización de las empresas públicas y reforma el código aduanero «para facilitar el comercio internacional».
«Estamos convencidos de hacer esto. Si sale mal, explota. Pero si no hacemos nada, también explota», advirtió el mandatario, y agregó que si el Congreso rechaza el DNU llamará a un «plebiscito o una consulta popular» para que la población se pronuncie sobre la norma.
Milei ha reprobado las manifestaciones de rechazo a su política y dijo que quienes se manifestaron los últimos días lo hicieron porque «no pueden aceptar que perdieron» en las elecciones presidenciales realizadas en noviembre pasado.
