BEIJING/Xinhua
Científicos chinos y extranjeros publicaron una evaluación del potencial de mitigación de carbono de los sistemas fotovoltaicos en techos (RPV, siglas en inglés) en China, señalando que para 2030 podrían estar compensando alrededor de 2.720 millones de toneladas de CO2.
Según el estudio, publicado recientemente en la revista Nature Communications, los RPV son importantes para lograr la transición energética y los objetivos climáticos, especialmente en ciudades con alta densidad de edificios y alto consumo de energía. Estimar el potencial de mitigación de carbono de los RPV a nivel de ciudad de todo un país de gran tamaño es un desafío, debido a las dificultades para evaluar el área de azoteas.
Investigadores de la Universidad Normal de Nanjing y otras instituciones de China, así como de Estados Unidos y Singapur, utilizaron datos geoespaciales de múltiples fuentes y regresión de aprendizaje automático para identificar un área de azoteas de casi 66.000 kilómetros cuadrados para 354 ciudades chinas en 2020, lo que representa alrededor de 3.630 millones de toneladas de mitigación de CO2.
Teniendo en cuenta la expansión de la tierra en las zonas urbanas y la transformación de la mezcla energética, los investigadores estimaron una mitigación potencial de CO2 de alrededor de 2.720 a 3.630 millones de toneladas en 2030, año en el que China planea alcanzar su pico de carbono.
El estudio también señala que es necesario explorar más a fondo cómo mejorar la flexibilidad de la producción de energía con RPV, por ejemplo combinando esta tecnología con la de almacenamiento de energía, a fin de lograr un suministro energético continuo durante la noche y reducir la fluctuación en la red eléctrica.
