Durante una visita al lado egipcio del cruce fronterizo de Rafah el viernes, el secretario general de la ONU, António Guterres, hizo un llamado a la provisión inmediata de ayuda humanitaria a Gaza, destacando que es una cuestión de vida o muerte para millones de sus habitantes.
De pie en el cruce de Rafah, donde aproximadamente 175 camiones cargados con asistencia humanitaria, suministros médicos, alimentos y mantas estaban en fila esperando la entrada a Gaza pero bloqueados por Israel, el jefe de la ONU dijo que la ayuda humanitaria es «la diferencia entre la vida o muerte» para muchos habitantes de Gaza.
«Necesitamos imperiosamente que estos camiones entren lo más rápido posible y tantos como sea necesario todos los días para proporcionar suficiente apoyo al pueblo de Gaza», dijo Guterres. El portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, Jens Laerke, afirmó hoy que las partes interesadas están cerca de llegar a un acuerdo sobre las modalidades de la operación de ayuda y que la primera entrega comenzará en los próximos días, según un comunicado de prensa de la ONU.
El Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (Hamás) lanzó un ataque sorpresa contra Israel el 7 de octubre, disparando miles de misiles e infiltrándose en territorio israelí, al que Israel respondió con ataques aéreos masivos y medidas punitivas, incluido un asedio al enclave con el corte de suministros de agua, electricidad, combustible y otras necesidades.
El actual conflicto entre Israel y Hamás, ahora en su decimocuarto día, ha acabado con la vida de más de 5.000 personas en ambos lados y ha dejado a muchas otras sumidas en una grave crisis humanitaria. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron el viernes por la mañana que habían atacado más de 100 objetivos en la Franja de Gaza durante la noche, incluido un túnel subterráneo, un almacén de armas y docenas de centros de mando. En otro frente, continúa el enfrentamiento entre el Ejército israelí e Hizbulá.
Los frecuentes intercambios de cohetes y misiles llevaron a Israel a evacuar el viernes Kiryat Shmona, una ciudad del norte de Israel que limita con el Líbano. Mientras tanto, un funcionario del Gobierno de Yemen dijo a Xinhua el viernes que el grupo rebelde hutí lanzó el jueves varios misiles y drones cargados de explosivos desde la provincia noroccidental de Hajjah en Yemen hacia el Mar Rojo.
También el jueves, el secretario de prensa del Pentágono, Pat Ryder, dijo que el destructor USS Carney de la Armada estadounidense interceptó tres misiles de crucero y múltiples drones lanzados por los hutíes desde Yemen.
Oficiales militares yemeníes indicaron que el grupo hutí podría lanzar misiles y drones hacia el Mar Rojo en un intento de abrir un nuevo frente contra los aliados de Estados Unidos en la región. Anteriormente, el líder hutí Abdul-Malik al-Houthi amenazó en un discurso televisado con bombardear Israel si Estados Unidos intervenía directamente en el actual conflicto de Israel con Gaza.
En respuesta al ataque con misiles, el portavoz de las FDI, Daniel Hagari, dijo el viernes que «Israel está preparado para enfrentar amenazas como estas de la mano de algunas de las mejores defensas aéreas del mundo».
