“Si los deseos fueran caballos, los mendigos serían jinetes.” John Dewey
No hay nada más alentador pero a su vez más destructivo como el “Deseo”, todos deseamos, anhelamos, soñamos con obtener tal o cual cosa suponiendo que logarlo nos hará más felices o menos infelices según sea el caso. El deseo es alentador porque nos brinda la oportunidad de visualizar cómo queremos vernos en un futuro, nos impulsa y da ánimos, cabe señalar que los únicos que no tienen deseos ni ilusiones son los apáticos y mejor ni hablar de ellos.
Ahora bien ¿es suficiente un deseo fervoroso y ardiente para concretar los proyectos? es aquí donde desmiento esa frase de “querer es poder”, ¿cuántas personas conocemos que teniendo tantas ganas de obtener terminan en la frustración?, si querían tanto ¿por qué no lo lograron?, es por ello que Cthulhu afirma que “Querer es poder, pero Saber es lograr”, quien no Sabe no planea, sino planea no puede poner en marcha y si no se pone en marcha un proyecto basado en el conocimiento no se logra nada.
Es bajo esta premisa que expondré dos casos de personajes políticos que aspiran a cargos de elección popular para el año 2024 en el estado de Querétaro, ambos diputados, uno federal y el otro local, uno del PAN y otro del PVEM.
Iniciaré con el diputado del PAN Felipe Fernando Macías “Felifer”, él se vende como la promesa joven que Querétaro espera, intenta ser simpático pero termina cometiendo ridículos como cargar cajas en un tianguis, comer y comer y comer y seguir comiendo tacos; fotos en su curul en San Lázaro con poses muy retadoras.
En el año 2022 realizó un par de foros “ciudadanos” al cual asistieron sus amigos y amigas entre ellos el delegado de Carrillo Puerto, Alberto Rojas; la síndico Juliana Hernández; la senadora Estrella Rojas y párele de contar.
En el año 2021 Felifer manifestó su intención de contender por la presidencia municipal de Querétaro para el año 2024, al igual que el secretario de desarrollo social, Agustín Dorantes; ambos con la idea de que con la mano en la cintura podrían evitar que la candidatura fuera para una mujer.
Agustín ya se dobló y se unió a la campaña de Murguía y Felifer intenta meter presión diciendo que él va a competir, el asunto es que todo mundo sabe que por los principios de paridad de género para la postulación de candidaturas de hombres y mujeres basadas en las tablas de rentabilidad electoral en Querétaro toca mujer.
Más allá de sus publicaciones, fotos en San Lázaro y su supuesto contacto social, las preguntas son ¿qué estructura social tiene?, ¿la está construyendo?, ¿quienes o qué grupos lo apoyan?, ¿qué le ofrece a los candidatos y candidatas fuertes para negociar algo?. A simple vuelo de pájaro, Cthulhu no ve nada que pueda concretar su deseo, ganas tiene, planeación no se le ve.
Ahora vamos con el segundo personaje, es un hombre ambicioso, con deseos, con moral política relajada y con un objetivo claro: el Senado de la República, Cthulhu se refiere al diputado local Ricardo Astudillo del PVEM; Astudillo quiere a toda costa ser senador y le verdad no le importa con quien tenga que negociar, para su propósito estableció una alianza de intereses con el actual senador Gilberto Herrera quien tiene el control de Comité Ejecutivo Estatal y del Consejo Estatal de Morena, así como de la estructura y recursos de la Delegación de la Secretaría del Bienestar en el estado; asimismo, Herrera tiene el derecho a la reelección y lo hará válido en caso de que Astudillo no sea el abanderado de una virtual alianza Morena-PVEM y llevárselo de suplente para después dejarlo en su Escaño.
¿Qué recibe Herrera a cambio del apoyo a Ricardo?, nada más y nada menos que el apoyo para ser el candidato a la presencia municipal de Corregidora por la misma alianza.
Astudillo es un tipo que no se pelea con nadie, al contrario tiende puentes y hace favores, es cordial con azules, tricolores, naranjas y guindas; él sabe que la política no es asunto de lobos solitarios. Se dice que Ricardo Astudillo, como regidor, era el principal operador del alcalde Roberto Sosa durante el trienio 2018-2021; y en temas donde podría haber hecho un escándalo no lo hizo como en el caso de El Batán.
El diputado del verde sabe que Morena es un partido de facciones y que de todo arman mitote y que además no le alcanza para ganar una elección, así que a la par del apoyo que recibe de Gilberto Herrera, está realizando recorridos por el Estado y armando lo que será su estructura electoral no sólo para él, sino para la “corcholata” de Morena que llegue o tal vez para otra opción, todo dependerá de sus intereses.
En un inicio intentó colgarse del Secretario de Gobernación, Adán Augusto, pero se dio cuenta que aquí no prende nada este personaje y saltó a los brazos de Claudia Sheinbaum, y la verdad a Astudillo no le importan los principios de la 4T, se suma porque coyunturalmente le conviene para concretar su aspiración “es ahora o nunca”. Si el candidato es Ebrard, seguro se sumará con todo y la estructura que tenga.
Ricardo también se puede vender como el morenista más azul para tener el beneplácito del gobernador Mauricio Kuri, tener en él a un aliando y no a un opositor.
Los decidores políticos en el estado lo están ignorando, no ven lo evidente, Astudillo se puede convertir en la sorpresa de las elecciones del 2024, por entidad federativa entran 3 senadores, 2 por mayoría relativa y el tercero por el principio de primera minoría o sea el segundo lugar, ahora bien, ¿qué puede suceder si la fórmula que encabece Astudillo gana la senaduría por mayoría relativa?.
Entran él y la mujer que lo acompañe, esto repercutiría en las aspiraciones de Luis Nava, ya que en la fórmula del PAN que será encabezada por una mujer, estaría, esta y quedará fuera el presidente municipal.
En tanto, si la fórmula del PAN gana, entran la mujer candidata y Nava, y Astudillo accede al escaño como primera minoría, o sea segundo lugar.
Astudillo gana perdiendo, esto es tener estrategia política. Cthulhu no intenta alabar a nadie, simplemente describe y analiza, no califica como bueno o malo, simplemente ejemplifica entre dos personas que aspiran a un cargo de elección popular, lograr comprender cómo construyen sus caminos.
Hasta aquí la columna de Cthulhu, hasta la próxima.