En la segunda jornada del congreso internacional de la Secretaría de Seguridad Pública del Municipio de Querétaro, el Dr. Sergio Rivera Magos, profesor investigador de la Facultad de CPyS (UAQ), fue el primer ponente del día con una plática titulada ‘Evolución de los medios de comunicación. Desafíos en el mundo de las Fake News y Retos Virales y Prevención de Ciberdelitos’.
En ella expuso las grandes dificultades a las que se enfrentan no solo la policía y las autoridades, sino también la población en general a la hora de reconocer fuentes confiables, de navegar de forma segura por la red y la carrera para mantenerse al día y alerta ante las nuevas modalidades de cibercrimen. Todo esto desde una perspectiva de las ciencias políticas, no tanto de una policial.
Fake news
Con la innovación tecnológica, explicó el Dr. Sergio, en especial con la digital, se dio una revolución en la vida de las personas y la transmisión de la información. Internet es la nueva fuente de comunicación y el mayor ente de su distribución, sin embargo esto lo ha llevado a ser considerado un espacio de absoluta libertad de expresión.
Y en ese ambiente de absoluta libertad de expresión, en el que cualquier individuo puede ser productor de contenido, sin la necesidad de ser mediado por alguna autoridad, es que nace la desinformación. Una desinformación que muchas veces es resultado de una polarización de opiniones que pocas veces son racionales; pero su mayor peligro reside en que puede surgir de cualquier medio e igual volverse viral, por lo que se vuelve muy difícil distinguir entre ‘información real’ e ‘información falsa’.
En particular, las fake news se vuelvem un problema porque se dan bajo la fachada de ser publicadas por un medio de comunicación legítimo, pero su única intención es engañar, mediante información o títulos sensacionalistas, pero que igualmente pueden ser creíbles. El profesor Rivera dio el ejemplo de la noticia altamente creída de que un Disneyland se iba a construir en Querétaro, que tuvo tanto impacto que incluso el gobierno estatal se vio obligado a desmentirla.
La información falsa junto el exceso de información, e información que tiene tanto elementos reales como inventados, han provocado que ya no se distingan las fuentes confiables, que sea complicado tomar decisiones correctas e incluso tener lecturas correctas de la realidad (saber qué está pasando en verdad); y esto vuelve más fácil que el publico consumidor esté más polarizado y sea más manipulable. Y lo más preocupante en este sentido, comparte el doctor, es que estas noticias falsas tienen un 70% más de probabilidad de volverse virales, porque se valen del sensacionalismo y amarillismo.
La solución está, entonces, en ser responsables con lo que consumimos y compartimos, por ejemplo, chequear y verificar los sitios y su información, no compartir cualquier página sólo por un título sin haber leído/visto/escuchado el contenido y siempre corroborar con otros medios.
Retos virales
Los retos virales, aunque parecen no ser de competencia policial, no deben tomarse a la ligera por padres o tutores debido a que hay muchos de ellos pueden resultar peligrosos, especialmente para los niños y adolescentes, que son los sectores que más los realizan.
Sin mencionar que existen retos que sí pueden terminar en lesiones o, incluso, delitos; por ejemplo, el lanzarse desde terrazas hacia piscinas puede terminar en lesiones graves, el dejar el auto en marcha mientras el conductor sale a bailar puede terminar en accidentes y daños a la propiedad o terceros; e incluso hay retos que se distinguen por su violencia, existe uno en el que una/s persona/s salen a la calle para encontrar a alguien a quién golpear, ése es el reto, golpear a un desconocido.
Lo difícil de los retos virales es que la prevención es tarea única de los padres, que deben mediadores entre sus hijos y lo que consumen; de otro modo pueden terminar en una sala de emergencias o incluso meterse en problemas con la ley.
Ciberdelito
Uno de los grandes aspectos que ha venido con el internet es que también es un medio para cometer delitos de todo tipo, ejemplos claros con el ciberacoso, la distribución de pornografía infantil, la distribución de material pirata, el robo de datos, el ciberfraude, el robo de identidad y el espionaje de todas nuestras actividades en la red.
La gran tarea para las autoridades digitales y, por supuesto, la policía cibernética es, sin duda, mantenerle el paso a los crímenes que han surgido junto con el internet, seguir manteniendo las defensas de los sistemas que son atractivos para crackers (hackers cuya intención es dañar a la institución o persona), crear protocolos de acción ante estos nuevos crímenes y más.
En cambio, los consumidores de internet, para evitar caer ante los ciberdelitos, deben convertirse en ciudadanos digitales. Y el Dr. Sergio Rivera explica que ser un ciudadano digital no es sinónimo de ser consumidor de internet, sino el comprometerse usarlo de manera responsable, de forma segura, actualizar todos los dispositivos, tener contraseñas difíciles y cambiarlas cada dos meses, tener antivirus en computadores, tablets y también en los celulares.
“Lo importante es ponérsela difícil a los delincuentes” – indicó.
