Susana Díaz es una mujer de ejemplo pues es esposa, madre y una licenciada en Turismo que tiene la gran responsabilidad de ser la directora de ventas de los 3 hoteles Marriott que se encuentran en el municipio de Querétaro, el AC de Antea, el Fairfield de Uptown y el Courtyard de Carrillo, cada uno con una personalidad propia y un público objetivo.
Con todo eso en mente, ha desarrollado un alto sentido de organización y respeto hacia los tiempos que ha destinado a cada una de sus actividades en una estructurada e imperturbable agenda, lo que le permite enfocarse plenamente en su trabajo y aprovechar los tiempos libres para disfrutarlos con su esposo, hija, abuela y todos sus seres queridos.
Marriott a primera vista
Cuando estaba en la carrera, la joven Susana tuvo la oportunidad de irse de intercambio a Puerto Vallarta, donde realizó prácticas profesionales en un Marriott. Fue una experiencia de corta duración, pero que despertó un inquebrantable objetivo, trabajar profesionalmente para la cadena hotelera.
Si bien trabajó para otros hoteles cuando concluyó su licenciatura, tiempo después no dudo en tomar la oportunidad de trabajar para el Marriott Courtyard de Toluca, lo que inició una historia ininterrumpida de 12 años con la marca, en los que ha pasado por varios de sus hoteles dentro y fuera del Estado de México, y eventualmente la trajo a Querétaro cuatro años atrás.
Desde que llegó a este clúster multipropiedad (refiriéndose así a los tres hoteles), tuvo la visión de posicionarlos como las marcas de hoteles donde uno debe alojarse. Incluso en pandemia lograron volver a posicionar los hoteles, y con confianza asegura que hoy en día el mejor hotel en Querétaro es el AC.
No es de sorprender que, con su iniciativa y dedicación, al año de que la Lic. Susana llegó, con su equipo de ventas, a nivel Marriot obtuvieron el premio al mejor equipo de ventas multipropiedad a nivel México, un gran reconocimiento a su trabajo. Con todo esto, espera poder trabajar en Querétaro por varios años más, sin embargo no descarta que, debido a todo el crecimiento que tiene la cadena en la República, su experiencia y sentido del deber sean llamados a otra ciudad.
Cambios que dan gusto
En 12 años pueden ocurrir muchas cosas, y la Lic. Susana nos comparte que en ese tiempo ha visto dos grandes cambios en la marca. Una es el dinamismo. Antes, una dirección de ventas se encargaba únicamente de una propiedad (un hotel), eso cambió hace unos 6 años, debido al crecimiento de la industria, se abrió la posibilidad de que una dirección se encargara de varias propiedades, algo que en un inició parecía una tarea titánica. Por ejemplo, ella misma debe manejarse entre el marketing, las ventas, los banquetes y el presupuesto de cada uno de los hoteles que dirige, pero con una buena organización y claridad de prioridades lo ha logrado impecablemente.
El segundo gran cambio que ha visto, y en el que también ha participado sin darse cuenta, es el del aumento de mujeres en puestos directivos, gerencias generales y direcciones generales. Además, comenta con satisfacción que el Marriot tiene como meta el siempre impulsar a las mujeres, sin importar si una es mamá o profesionista, y permitirles tener un balance entre su quehacer profesional y su vida personal.
La inquebrantable pasión
Para Susana Díaz, dedicarse a la hotelería es ponerse la camisa al 100% y saber que cada día será diferente, que se necesita de un sentido de servicio, de apoyo, de buscar resoluciones y siempre ser un buen anfitrión en todas las áreas del hotel. Todo ello implica mucho esfuerzo, tiempo y saber trabajar fuera del horario, y quien no esté dispuesto a todo ello, mejor ni tropezarse.
Y Susana nunca ha dudado ni del color de las mangas. Tiene un gran compromiso con su trabajo, con su familia, con la marca Marriot, que le ha permitido compaginar esas facetas de su vida sin descuidarlas, por todo y mucho más es que nunca renunciará a la hotelería.
Y en un futuro a mediano plazo le gustaría verse como gerente general de alguna propiedad dentro de Marriot o como directora de ventas de propiedades de mayor envergadura. Pero, sin importar cuál que sea el resultado, no hay dudas de que hará un trabajo impecable.
