QUITO/Xinhua
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, ratificó hoy la decisión de su Gobierno de seguir combatiendo al crimen organizado tras dos atentados con coches bomba ocurridos en las últimas horas en Quito, capital del país, que no causaron víctimas, pero sí daños materiales.
El mandatario escribió en su cuenta en la red social X, antes llamada Twitter, que estos hechos violentos son una respuesta de las organizaciones criminales a las acciones de requisa de armas, municiones, explosivos y objetos prohibidos que ejecutan desde hace varios días militares y policías en las cárceles del país.
Estas incursiones se realizan en el marco de un estado de excepción decretado por Lasso por 60 días en todo el sistema penitenciario ante recientes hechos violentos, incluido el incidente que dejó 31 reos asesinados en julio pasado.
«Las medidas que hemos tomado, en especial, en el sistema penitenciario, han generado reacciones violentas de las organizaciones criminales que pretenden amedrentar al Estado. Pero estamos firmes y no vamos a retroceder en el objetivo de capturar a peligrosos delincuentes, desarticular bandas delictivas y pacificar las cárceles del país», publicó el mandatario.
Lasso también pidió a los jueces que actúen con celeridad y mucha rigurosidad, en el contexto de que delincuentes involucrados en hechos violentos recuperan fácilmente su libertad.
El primer coche bomba estalló la noche del miércoles y, el segundo, la madrugada de este jueves, en el sector La Mariscal y la avenida 12 de octubre, respectivamente, ambos ubicados en el centro norte de Quito.
Las investigaciones llevaron a la captura de 10 detenidos, la mayoría con antecedentes penales, según la Policía, que señaló que una organización criminal estaría detrás de estos hechos.