WASHINGTON/Xinhua
El Senado de Estados Unidos aprobó en una votación de 88-9, un proyecto de ley de financiamiento provisional de 45 días, en un esfuerzo de último minuto para evitar un cierre del Gobierno federal.
Horas antes, la Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley en una votación de 335-91.
En la mañana del sábado, el presidente de la Cámara Baja, el republicano Kevin McCarthy, dio a conocer un nuevo plan que mantendrá las agencias federales financiadas en los niveles actuales hasta mediados de noviembre e incluye 16.000 millones de dólares de financiación para asistencia en casos de desastre.
El nuevo proyecto de ley eliminó los fuertes recortes de gasto que pedían los republicanos conservadores, y no incluye la ayuda adicional para Ucrania que solicitaban los demócratas.
La nueva propuesta de McCarthy representó una sorpresa, ya que había tratado de impulsar un proyecto de ley de financiación con grandes recortes de gastos y disposiciones de seguridad fronteriza, en un intento de obtener el apoyo de los republicanos conservadores.
Los republicanos tienen una escasa mayoría en la Cámara de Representantes.
La difícil situación de McCarthy en la Cámara Baja no le deja más opción que «complacer» al ala derecha del Partido Republicano.
Tras las elecciones intermedias del año pasado, el Partido Republicano consiguió de nuevo el control de la Cámara de Representantes con 221 escaños, apenas nueve más que los 212 puestos del Partido Demócrata, lo que significa que incluso cinco «rebeldes» son suficientes para derrotar una agenda legislativa republicana.
La decisión de McCarthy de presentar el proyecto de ley de financiamiento provisional «en limpio» es bien recibida por los demócratas y la Casa Blanca, pero ha molestado a algunos republicanos, especialmente a los de línea dura, que habían amenazado con sacarlo del puesto de liderazgo de la Cámara Baja.
El proyecto de ley fue enviado al presidente estadounidense, Joe Biden, para su firma.
