QUITO, 7 abr (Xinhua) —
El personal de la Embajada de México en Ecuador retornó a su país de origen, tras la ruptura de relaciones diplomáticas con la nación sudamericana, después de la irrupción de policías ecuatorianos a su sede el pasado 5 de abril para detener al exvicepresidente ecuatoriano, Jorge Glas, condenado por actos de corrupción.
La detención de Glas, quien se encontraba refugiado en la embajada mexicana desde el 17 de diciembre pasado, se produjo después de que México le concediera asilo político. El regreso del personal diplomático mexicano y sus familias fue confirmado por la Secretaría (Ministerio) de Relaciones Exteriores de México a través de su cuenta en la red social X.
«El personal diplomático de @EmbaMexEcu ya viaja de vuelta a México desde Quito», publicó la entidad mexicana. «Países amigos y aliados de nuestra embajada apoyaron para velar por la integridad de las personas mexicanas, a través de su acompañamiento en el recorrido hasta el aeropuerto de la capital ecuatoriana», agregó.
La irrupción policial a la Embajada mexicana llevó al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a romper relaciones diplomáticas con Ecuador, al considerar la acción como una violación de la soberanía de su país y del derecho internacional. Instruyó, además, a la canciller mexicana Alicia Bárcena coordinar el retorno del personal diplomático acreditado en Ecuador, junto con sus familias, después del «violento ataque» perpetrado a la Embajada de México.
Se indicó que un grupo de 18 personas retornarán en un vuelo comercial de Ecuador a la Ciudad de México. El abandono de la Embajada mexicana en Ecuador sigue al anuncio del Gobierno de México del cierre indefinido de la legación diplomática por la violación de su inmunidad y la agresión a su personal.
La embajada de México en Ecuador «permanecerá cerrada indefinidamente, así como los servicios consulares», según comunicó la institución. La crisis diplomática entre ambos países se profundizó el pasado 4 de abril, luego de que Ecuador declaró como «persona non grata» a la embajadora de México en el país sudamericano, Raquel Serur, y le dio un plazo de 72 horas para que abandonara la nación.
La decisión se tomó en rechazo a declaraciones emitidas por el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, sobre asuntos políticos internos de Ecuador, que la cancillería ecuatoriana calificó como «muy desafortunadas». El mandatario mexicano se refirió a las elecciones generales anticipadas de 2023 en Ecuador y al asesinato del excandidato presidencial, Fernando Villavicencio, ocurrido el 9 de agosto pasado en un ataque armado.