CIUDAD GUZMÁN,
México/Xinhua
El estado mexicano de Jalisco, famoso por ser la cuna del mariachi y la charrería, así como por su distintiva producción de tequila, es uno de los principales actores en la producción de aguacate, la fruta verde que ha ganado popularidad en todo el mundo por sus beneficios nutricionales y su versatilidad en la cocina.
Más allá de ser un líder en los volúmenes productivos, el occidental estado mexicano apuesta por una estrategia sustentable que garantice no sólo la calidad del aguacate que exporta, sino también el respeto por el medio ambiente y el bienestar de las comunidades locales. En contraste con otros estados productores de aguacate en México, gran parte de la superficie dedicada al cultivo en Jalisco proviene de zonas de reconversión, según explicó a Xinhua el director de la Asociación de Productores Exportadores de Aguacates de Jalisco (Apeajal), Jesús Michel Espinoza.
Las zonas de cultivo «eran zonas maiceras, zonas ganaderas, de pastizales, y la mayor parte de la superficie cultivada al menos en el estado está focalizada en estos temas», detalló Espinoza durante una entrevista en una huerta de aguacates en Ciudad Guzmán, cabecera del municipio de Zapotlán el Grande, al sur de Jalisco.
La reconversión implica que, en lugar de deforestar áreas protegidas, los productores están transformando tierras previamente dedicadas a otros usos agrícolas. Además, Jalisco ha implementado políticas rigurosas para evitar la expansión del cultivo en zonas forestales protegidas. «Ha habido una modificación reciente en el nuevo registro o alta de huertos en el que los huertos que estén en zonas forestales del 2018 para acá no se pueden registrar», afirmó Espinoza.
Estas medidas buscan proteger los ecosistemas locales y asegurar que la expansión del cultivo del aguacate no comprometa la biodiversidad de la región. La sustentabilidad no solo se refleja en la gestión de la tierra, sino también en prácticas como la reforestación y el uso eficiente de recursos. La Apeajal ha establecido un programa de reforestación que produce anualmente cerca de 50.000 plantas, incluyendo especies forestales y nativas.
Estas plantas se utilizan para crear corredores biológicos que contribuyen a la biodiversidad y apoyan a los polinizadores, esenciales para la agricultura. «Somos parte del comité de polinizadores, de donde se ha desdoblado un manual para el manejo y cuidado de estos y así mismo impulsamos el uso eficiente de plaguicidas», subrayó el director de la Apeajal.
El agua, recurso vital y cada vez más escaso, también ha sido un foco de atención para los productores de aguacate en Jalisco. «Acá en Jalisco, a diferencia de otras zonas productoras, contamos con gran parte de la superficie de riego», mencionó Espinoza, destacando el esfuerzo de los productores por adaptar tecnologías que reduzcan el consumo de agua.
Más de la mitad de las huertas del estado han implementado sistemas de riego por goteo, una técnica que permite un uso más eficiente del agua y minimiza las pérdidas. El compromiso con la sustentabilidad de los productores de aguacate de Jalisco será el tema central del 8º Congreso del Aguacate Jalisco 2024, que se llevará a cabo del 28 al 30 de agosto en el Recinto Ferial de Ciudad Guzmán.
Este evento anual, organizado por la Apeajal, reunirá a especialistas nacionales e internacionales bajo el lema «Tecnología para el presente y futuro», con el fin de discutir las tendencias emergentes y los desafíos que enfrenta la industria del aguacate.
El presidente de la Apeajal, Eleazar Oceguera, subrayó en la convocatoria del evento que el Congreso del Aguacate no solo es un espacio para la innovación tecnológica, sino también para fomentar una mayor conciencia ambiental entre los productores.
«El cambio climático ha golpeado a toda la producción de alimentos. Debemos estar preparados con nuevas técnicas, con otras formas para mitigar este impacto. Por eso hacemos reforestaciones en corredores agroecológicos y cuidamos más el agua, a través de sistemas como el riego por goteo», explicó Oceguera.
El programa del Congreso del Aguacate contempla 32 conferencias que abordarán temas de vital importancia para la industria, organizados en cuatro ejes: inocuidad, sustentabilidad, fitosanidad y trazabilidad. Además de las conferencias, incluye visitas demostrativas a huertas aguacateras y exposiciones sobre exportación, cambio climático, control de plagas y enfermedades, y el uso de tecnologías avanzadas.
La Apeajal, que representa a más de 3.200 productores y 23 empaques exportadores de aguacate, ha jugado un papel clave en posicionar a Jalisco como el segundo estado productor y exportador de aguacate más importante de México, enviando la fruta a 30 destinos internacionales.
En 2023, Jalisco exportó 120.802 toneladas de aguacate y las cifras para 2024 indican un crecimiento continuo, de acuerdo con los datos y estimaciones oficiales. La apuesta del estado por una producción sustentable del fruto no sólo busca asegurar la calidad del producto que llega a los mercados internacionales, sino también preservar el medio ambiente y las comunidades que dependen de esta industria.
«Invitamos a todos a conocer nuestra industria del aguacate, la cual tratamos o trabajamos todos los días para que sea referencia tanto en la parte de sustentabilidad como en la parte de inocuidad y fitosanidad», concluyó Espinoza, con la certeza de que Jalisco puede exportar junto con sus aguacates un modelo de producción ejemplar para quienes buscan equilibrar el desarrollo económico con la protección del medio ambiente.
