Dios dice que, para sus hijos, tiene buenos planes, para darles un futuro y una esperanza. (Jer 29:11). Eso es algo maravilloso. Es una muy buena noticia saber que Dios ya planeó tu vida por ti y tiene los planes perfectos para que te vaya bien. Ese es el plan maestro.
Te voy a contar una parte de la vida de Nehemías y, para eso, tengo que dar primero un contexto histórico.
Nabucodonosor, rey de Persia, había invadido y conquistado Judá y Jerusalén, habían matado a una gran cantidad de judíos y se había llevado cautivos a muchos de los sobrevivientes. Sin embargo, Dios había dado una profecía exacta sobre el exilio, en donde decía que duraría 70 años y después los regresaría a su tierra.
Hacia el final de ese periodo, el retorno de los judíos a su tierra ya había comenzado y Nehemías era un judío con un alto puesto en la corte del rey Artajerjes. Un día, se enteró de que la muralla de Jerusalén estaba derribada y las puertas consumidas por el fuego.
Entonces se puso en ayuno y oración. Poco después, mientras le servía al rey, esté notó que estaba muy triste y le preguntó que pasaba. Nehemías le contó la situación de Jerusalén y le pidió que le permitiera ir a reparar la ciudad y los recursos necesarios. Y sucedió el milagro, el rey le concedió sus peticiones.
Tanto Israel como Jerusalén son parte esencial de los planes eternos de Dios, tanto física como espiritualmente, porque Él quiere establecer y restablecer su Reino. Y ese era el plan maestro que Dios tenía para Nehemías y es el que tiene para ti.
Nehemías había nacido en la fecha y lugar precisos y había ocupado el trabajo adecuado dentro del plan de Dios para su vida. Cuando se enteró de la situación en Jerusalén y oró, entonces, el Espíritu Santo le rebeló la siguiente parte del plan: debía reconstruir las murallas de Jerusalén. Obedeció, puso manos a la obra y con el favor de Dios, obtuvo los recursos necesarios.
Tú también naciste en la fecha y lugar precisos para el plan maestro de Dios para tu vida. Solo tienes que saberlo y ponerlo en práctica. Y si decides seguir el plan maestro de Dios para tu vida, te voy a decir tres cosas que van a pasar:
- Vas a tener enemigos que se opondrán al plan. Desde que Nehemías llegó a Jerusalén, existieron personas que trataron de detener el plan por todos los medios. Sabemos que los enemigos son Satanás y sus huestes, que usan cosas y personas para oponerse a la obra de Dios.
Sin embargo, Nehemías y su gente hicieron 3 cosas: oraron, se prepararon para la guerra y siguieron trabajando en el plan. El resultado fue que Dios frustró todos los intentos de sus enemigos.
De la misma manera hoy, tu trabajo será orar, prepararte para la guerra con la armadura espiritual y seguir con el plan maestro de Dios para tu vida.
- Vas a tener personas que colaborarán con el plan. Nehemías juntó a los líderes judíos, les comunicó el plan y ellos se unieron inmediatamente.
El plan maestro de Dios no es para tu gloria sino para la de Él, sin embargo, seguir el plan va a lograr dos efectos: va a bendecir tu vida para que te vaya bien y va a lograr que otros vean el propósito de Dios y lo sigan.
- Si perseveras, vas a lograr cumplir el plan. A pesar de todos los inconvenientes, con la perseverancia de Nehemías y los judíos que se pusieron a trabajar, el muro quedó finalmente terminado.
Entonces, los judíos comenzaron a llegar en masa a Israel, se restauraron los servicios espirituales y el pueblo finalmente se acercó a Dios, prometiendo serle fiel. El plan maestro de Dios de restaurar a su pueblo se había cumplido.
Nehemías prosperó y fue nombrado gobernador de la provincia. Dios nunca se olvida de las obras que se hacen a favor de Su Reino.
Lo mismo sucederá contigo. Hemos sido enviados a esta tierra para hacer la voluntad del Padre Celestial y es maravilloso saber que tus recompensas serán múltiples, por un lado, tendrás la enorme satisfacción de ver hecho realidad el plan maestro de Dios para tu vida, por otro, el Señor te bendecirá en esta vida terrenal y, finalmente, tus recompensas eternas, las que valen la pena, serán multiplicadas y te estarán esperando.
Pastor Jorge Cupido
@jorgecupidoqro
EL SELLO
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