Casi tres cuartas partes de los profesionales (71%) han declarado que están abiertos a volver a su empresa anterior a Covid, y la mitad admite que las razones por las que se fueron ya no son aplicables en el mercado actual.
Según una encuesta reciente la consultora de reclutamiento Robert Walters, el 45 % de los trabajadores que dejaron su trabajo después del confinamiento lo hicieron por una mejor paga, y otro 35 % lo hizo por una mejor cultura laboral o por un mayor propósito/realización en su trabajo. Dos años después, el 48 % de los profesionales admite que su empleador actual ya no satisface sus necesidades.
Toby Fowlston, CEO de la firma de reclutamiento global Robert Walters comenta:
«La recuperación posterior a la pandemia vio un número récord de empleados que dejaron su trabajo en lo que se anunció como ‘La gran renuncia’. Sin embargo, nuestra investigación indica los primeros signos de ‘El gran arrepentimiento’: el 71 % de los profesionales afirman que les gustaría volver a su empleador anterior.
A lo largo de 2021, vimos aumentos salariales récord ofrecidos a los profesionales, con promesas de una cultura súper flexible e híbrida. Estos aumentos salariales ahora palidecen en comparación con el aumento del costo de vida y la inflación, y es mucho menos probable que los nuevos empleados a quienes se les ofrecieron salarios inflados hayan recibido un aumento salarial este año. Parece que los trabajadores se están dando cuenta de que, después de todo, es posible que el pasto no haya sido más verde”.
Mantener un pie en la puerta
El 82% de los encuestados admitió haber mantenido algún tipo de contacto con un jefe anterior, y casi un tercio afirmó que esto fue con el propósito principal de mantener la puerta abierta para futuras oportunidades laborales (29%).
De hecho, una cuarta parte de los profesionales admitió haber contactado a su empresa anterior en el último año con respecto a las oportunidades laborales, y un 11% adicional afirmó que aún no lo ha hecho pero que tiene la intención de hacerlo este año.
Menos de 1 de cada 5 empleados ha cerrado completamente la puerta a sus organizaciones anteriores, y el 18 % afirma que no mantiene ningún contacto con su líder anterior.
Efecto boomerang
Si bien el sentimiento puede estar presente en los profesionales, parece que no se puede decir lo mismo de las empresas; de hecho, el 44% admite dudar en permitir que un antiguo empleado regrese al equipo, y solo una quinta parte afirma que solo lo consideraría si fue un ‘empleado excepcional’.
Toby agrega: “Me temo que los líderes deben de analizar a detalle. El mercado global de reclutamiento se ha desacelerado ligeramente en 2023, la escasez de candidatos continúa, por lo que el hecho de que haya un grupo de talentos abiertos para reincorporarse al negocio podría entusiasmarlos. Es un talento que ya estará familiarizado con los procesos y tendrán un interés previo en la marca, todas cualidades que pueden tomar años para inculcar en un nuevo empleado.
Las empresas que buscan contratar no solo deberían considerar volver a contactar con los exempleados, sino que también deberían buscar capacitar a los gerentes para llevar a cabo un proceso de salida positivo, ya que los ‘empleados boomerang’ podrían ser una solución a la escasez de habilidades.
Algo clave para las empresas, es gestionar el regreso de los empleados boomerang entre los trabajadores existentes, en particular si alguien regresa en un puesto de mayor jerarquía que cuando se fue. Es necesario lograr un equilibrio y los empleadores deben evaluar que están haciendo todo lo posible para abrir líneas de oportunidad dentro de una organización, o corren el riesgo de enviar el mensaje de que una ruta hacia la promoción y un mejor paquete es tomar la ruta del boomerang.
