Tengo mis diosas, quienes son las protagonistas de los ensayos que escribo. Son mujeres admirables, que han cambiado a lo largo de los años gracias al esfuerzo de cada una de ellas y que realmente existieron: Florencia Nightingale, Marie Curie, Hedy Lamarr, Simone de Beauvoir, Frida Kahlo, Rosa Parks, Valentina Tereshkova y hasta Coco Chanel. Ellas me han enseñado a ser libre, independiente, determinada. Algo flexible, también.
A trazar metas precisas y disfrutar el camino. A aceptar el gozo de la sinrazón, pero sin dejar fuera al intelecto. Mujeres admiradas y admirables. Que se rodearon de hombres de mentes brillantes: Howard Hugues, Pierre Curie, Napoleón Bonaparte, Diego Rivera y Voltaire…. Fueron mujeres valientes, acostumbradas a sacarle el Si a la vida.
Y están las diosas del hoy. La que desde frente a un ejército de talibanes, salió a la calle con su cuaderno y su lápiz, empujando a las niñas a luchar por su derecho a estudiar, y sobreviviendo a un balazo en la cabeza, volvió a salir, y con su mismo lápiz va por el mundo horadando el injusto cerebro de la sociedad. Ella es Malala Yousafzai.
O Margaret Tatcher a quién admiro desde muy niña. Mi padre solía leerme las notas en el periódico y la ponderaba sobre todos los ministros de Europa. Siempre defendió su posición ante la guerra de Las Malvinas. Fue una política británica que ejerció como primera ministra de Reino Unido desde 1979 a 1990, siendo la persona en ese cargo por mayor tiempo durante el siglo XX y la primera mujer que ocupó este puesto en su país.
También conocí en los diarios a Benazir Bhutto fue la primera mujer en ser elegida Primera Ministra de un país musulmán. Bhutto llegó a los titulares de todo el mundo cuando ganó las elecciones de 1988 en Pakistán. Además, demostró ser una figura fuerte y resistente en una nación arruinada por sangrientos golpes militares. Murió tras recibir varios disparos en el cuello y en el pecho por parte de un suicida que posteriormente detonó una bomba, causando la muerte de al menos otras 38 personas. En ese momento, la política se encontraba en plena campaña de cara a las elecciones de enero de 2008. Dos meses antes, poco después de su retorno del exilio, había sobrevivido a un atentado similar que acabó con la vida de al menos ciento treinta y seis personas.
Admirable por su fortaleza ya que perdió a su madre a los 13 años, Virginia Woolf, escritora británica se convirtió en uno de los máximos símbolos del feminismo y modernismo literario del siglo XX. De hecho, su ensayo Una habitación propia, que data de 1923, es uno de los textos más citados por el movimiento. Creadora de una fuerte mentalidad de lucha contra el machismo que plasmó en sus obras.
Premio Nobel de Medicina en 1988, Gertrude B. Elion, hicieron posible sus medicamentos el transplante de órganos. Sus píldoras transformaron la leucemia infantil, que era fatal, en una enfermedad a la que sobreviven hoy el 80% de las víctimas. Además, desarrolló el tratamiento para gota y herpes. También creó el primer medicamento capaz de destruir un virus. Su investigación sentó el fundamento de la AZT, que por años fue la única droga aceptada en los Estados Unidos de América para los pacientes.
Hoy por hoy, el mundo se engalana con las ganadoras del Nobel de Química de 2020. La Real Academia de las Ciencias en Suecia ha anunciado a las galardonadas: Emmanuelle Charpentier y Jennifer A. Doudna “por el desarrollo de un método para la edición del genoma”, ganadoras del Premio Nobel. Se trata de uno de los cinco premios Nobel establecidos en el testamento del químico e inventor sueco Alfred Nobel en 1895.
“Desde que Charpentier y Doudna descubrieron las tijeras genéticas CRISPR/ Cas9 en 2012, su uso se ha disparado. Las tijeras genéticas han llevado las ciencias de la vida a una nueva época y, en muchos sentidos, están aportando el mayor beneficio a la humanidad”, explica la academia en un comunicado.
Asimismo, los grandes protagonistas en física son los agujeros negros, uno de los cuerpos más extraordinarios que al día de hoy siguen siendo un gran misterio para la ciencia. La astrónoma estadounidense por su descubrimiento de un objeto compacto supermasivo en el centro de nuestra galaxia, en la región conocida como “Sagitario A*, a unos 25,500 años luz de la Tierra. Gracias a años y años de minuciosas observaciones y mapeos de los movimientos de las estrellas más próximas a esta región, Ghez ha podido confirmar que existe un objeto extremadamente masivo e invisible que tira violentamente de estas estrellas acelerándolas hasta velocidades vertiginosas. Este “monstruo oculto” tiene aproximadamente cuatro millones de masas solares en una región no mayor al tamaño del sistema solar.
Mujeres que convergen en los mismos puntos: todas ellas son mujeres, madres, esposas y exitosas profesionistas plagadas de pasiones y mentes creativas en las que habitan con ecos de sororidad otros temas como la condición de las mujeres en la época actual.
Son cómplices en los desafíos.
Por: Elizabeth Garfias